Sabiamos que Porto Alegre, era una cuidad como todas, llena de gente, edifícios, grandes malls, autos y gente por todos lados. Buscando siempre la seguridad, contactamos a Laura, que amistosamente nos envio su direccion para que llegaramos ese mismo dia a su casa. Vueltas y vueltas, sube y baja, hasta que de pronto dimos con la calle... justo era la mas empinada de todo el barrio, solo nos quedaba esperar que la entrada de la casa no fuese muy complicada y que no quedara a mitad de cuadra.... y adivienen!!! Era justo ahí y mas encima tenia un porton que se elevaba y no alcanzaba a pasar el techo de la Sra. Malva...la siguiente pregunta fue: como saldremos de aca?
Bueno, todas esas situaciones quedaron a trás cuando conocimos a la família de Laura, tan amigable y gentil, nos recibieron muy bien, contaron buenas historias y dieron buenos consejos y hasta tuvimos un excelente traductor de espanhol-portuges (Hermano de Laura).
Luego de este paso por la cuidad, nuestra Idea era seguir el camino por el litoral, pero luego de saber que existia una atrayente sierra hacia el interior de Rio agrande do sul, decidimos probar suerte y partimos rumbo a Tres Côroas, Gramado y Canela.
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